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El litio desempeña un papel fundamental en la actualidad debido a su papel en la fabricación de baterías para vehículos eléctricos y el almacenamiento de energía, lo que lo convierte en un componente esencial para los acumuladores energéticos.
La movilidad sostenible representa una transformación integral en la forma en que nos desplazamos, promoviendo alternativas amigables con el medio ambiente, como vehículos eléctricos, transporte público eficiente y movilidad activa como la bicicleta. Su objetivo es reducir la dependencia de los combustibles fósiles, combatir la huella de carbono y contribuir a la lucha contra el cambio climático.
El litio juega un papel clave en la movilidad sostenible debido a su capacidad para almacenar grandes cantidades de energía de manera eficiente. Junto con el cobalto y el níquel, forma parte esencial de la industria automotriz, que se está volcando cada vez más a la producción de vehículos eléctricos.
El litio, el más liviano de los metales, es un mineral altamente demandado en el mundo por su uso -entre otras cosas- para la fabricación de las baterías que utilizan los vehículos eléctricos y para el almacenamiento de energía. La clave del litio está justamente en esta diferenciación: no produce la energía, sino que la almacena, siendo muy importante para cualquier tipo de acumulador energético.
En cuestiones de sustentabilidad, los avances que conlleva la producción del litio han demostrado ser claves en la disminución de la dependencia de combustibles fósiles (los combustibles tradicionales), al igual que para bajar la emisión de gases que impactan en el ambiente.
En la actualidad, este metal blando que fue descubierto a comienzos del siglo XIX dio inicio a una transición absoluta en el mundo de las energías renovables, la última tendencia por la que apuestan a diario empresas públicas y privadas, al igual que gobiernos.
¿Qué es la movilidad sostenible?
La movilidad sostenible representa una revolución en la forma en que nos desplazamos a diario. Se trata de un enfoque integral que busca transformar nuestro sistema de transporte hacia alternativas más amigables con el entorno, tales como la promoción de vehículos eléctricos, el fortalecimiento del transporte público eficiente y el incentivo de medios de movilidad activa como las bicicletas.
El propósito de esta tendencia es reducir drásticamente la dependencia de las sociedades de los combustibles fósiles, disminuir la huella de carbono y contribuir a la lucha contra el cambio climático.
La movilidad sostenible tiene un impacto positivo en el medio ambiente y beneficios tangibles para la calidad de vida de las personas. Al fomentar la adopción de formas de transporte más limpias y eficientes, se reduce la congestión del tráfico, disminuyen los niveles de ruido y se mejora la calidad del aire en áreas urbanas.
Este cambio hacia la movilidad sostenible no solo es una necesidad imperativa para preservar nuestro planeta, sino que también representa una oportunidad para construir ciudades más habitables y justas.
¿Por qué el litio ayuda a una movilidad más sostenible?
Como fue mencionado antes, este metal tiene la capacidad de almacenar grandes cantidades de energía a la vez para luego utilizarla con grandes niveles de potencia, siempre teniendo en cuenta que la energía que se almacena en dichas baterías no provenga de fuentes energéticas contaminantes.
Los participantes de la tríada que apunta hacia este “cambio de paradigma” en el mundo de las energías son el litio, el cobalto, y el níquel. Los tres forman una parte elemental del futuro de la industria automotriz, que cada día destina más recursos a la producción de autos eléctricos.
Respecto a esto, de acuerdo con la International Energy Agency, al día de hoy existen aproximadamente 10 millones de vehículos eléctricos en funcionamiento, y probablemente se llegará a 66 millones en 2025, a 137 millones en 2030 y finalmente en 2040 el número total superará los 380 millones.
Es a partir de estos números prometedores para la industria que aumentará de manera exponencial la demanda de litio en el mundo, obligando a la producción a acelerar sus tiempos y mejorar sus métodos, lo que llevará a un aumento lógico de precios sobre el metal.
En un mundo cada vez más motivado por la conciencia, es importante lograr visualizar cómo impacta directamente en nuestra vida cotidiana las decisiones que tomen las grandes empresas que trabajan a nivel industrial con distintos elementos que nos da la tierra.
El litio es sin dudas un elemento clave en la búsqueda de la movilidad sostenible que ayude a una vida más saludable a las personas y al planeta.
