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El litio se convirtió en los últimos años en un recurso clave para la creación de sistemas de almacenamiento de energía y es una pieza central en la transición energética. Es un mineral ubicado en el grupo 1 de la tabla periódica, el de los elementos alcalinos. El grupo 2 de la tabla periódica, por otro lado, presenta distintas características y los minerales que lo conforman reciben el nombre de alcalino térreos.
Existen diferencias entre el litio y los minerales alcalino térreos, particularmente ligadas a la valencia y capacidad de reacción de los elementos. Pese a eso, también hay puntos en común entre ambos grupos de la tabla periódica. Por ejemplo, cuando se habla del litio a comparación de los elementos térreos, se encuentra que ambos son metales y, por lo tanto, comparten propiedades básicas como la conductividad eléctrica, la maleabilidad y ductilidad.
Entre sus diferencias, mientras que los metales del grupo 1 poseen un electrón en su capa más externa y tienen tendencia a perderlo en reacciones químicas, formando iones; aquellos del grupo 2 poseen dos electrones en esa misma capa. Al igual que los alcalinos, los térreos también tienden a perderlo y a formar iones de carga positiva +2.
En los últimos años, el litio se convirtió en un recurso clave para la creación de sistemas de almacenamiento de energía. Por su gran impacto, llama la atención a nivel mundial a causa de su colaboración con la transición energética y un futuro sustentable.
Cuando se habla de litio se hace referencia al mineral que está ubicado en el grupo 1 de la tabla periódica, entre los elementos alcalinos. Se trata de un metal blando de color blanco que lleva varios años en uso en distintas actividades de carácter industrial.
Pese a su alta demanda, no son muchos los países que cuentan con litio en su territorio, por lo que las posibilidades de extraerlo se concentran en pocas regiones. En Argentina, el mineral está presente en las provincias de Salta, Jujuy y Catamarca, aunque de a poco van surgiendo proyectos que buscan expandir la exploración del recurso.
Metales alcalinos térreos
Si bien el litio es un metal alcalino, sus propiedades y características químicas lo diferencian de otros minerales que se caracterizan por ser térreos. El término tiene su origen en la antigüedad, cuando muchos elementos eran encontrados en la tierra.
El grupo 1 de la tabla periódica, el de los alcalinos, está formado por litio (Li), sodio (Na), Potasio (K), Rubidio (Rb), Cesio (Cs) y Francio (Fr). Por otro lado, los alcalinos térreos pertenecientes al grupo 2 son el Berilio (Be), Magnesio (Mg), Calcio (Ca), Bario (Ba), Estroncio (Sr) y Radio (Ra).
Estos últimos son de vital importancia en distintas áreas tecnológicas e industriales. Sus propiedades químicas los convierten en piezas esenciales en la fabricación de productos de diferente tipo, como metales y aleaciones, la creación de materiales de construcción, fuegos artificiales y en la medicina.
Los metales alcalinos térreos se caracterizan por tener cuatro propiedades fundamentales:
- 1. Electrones en la capa externa: cada uno de los elementos posee dos electrones en su capa más externa, siendo esta la principal diferencia con los metales alcalinos del grupo 1, donde está el litio.
- 2. Tendencia a perder electrones: frente a alguna reacción química, estos metales tienden a perder esos dos electrones de la capa externa, formando cationes con una carga positiva de +2.
- 3. Fusión y ebullición: los metales alcalinotérreos se caracterizan por ser más densos que aquellos del grupo 1, y eso posibilita que sus puntos de fusión y ebullición sean más elevados.
- 4. Óxidos básicos: cuando reaccionan con oxígeno, forman óxidos que presentan algunas propiedades básicas.
Puntos en común con el litio
Aunque los metales alcalinos y los alcalinos térreos tienen varias diferencias en cuanto a su composición, existen algunos puntos en común. El litio en particular se caracteriza y destaca por presentar un tamaño más pequeño en relación con otros metales.
Cuando se habla del litio a comparación de los elementos térreos, se encuentra en primer lugar que ambos son metales y, por lo tanto, comparten propiedades básicas como la conductividad eléctrica, la maleabilidad y ductilidad.
A su vez, la formación de iones positivos, cationes, es algo común a estos metales: todos ellos tienden a perder electrones en las reacciones químicas para formar iones positivos. En ambos casos, las estructuras de red metálica permiten que los átomos tengan facilidad para deslizarse unos sobre otros sobre el metal.
La reactividad química es otro de los puntos que vincula al litio con los alcalinos térreos. En particular, aquellos elementos pertenecientes al grupo 1 son reactivos y tienden a formar compuestos iónicos con no metales, como halógenos.
Además, el litio y los metales alcalinos térreos son excelentes conductores de calor y electricidad a raíz de su configuración y debido a la movilidad de los electrones en la estructura metálica.
Principales diferencias
Los puntos de ruptura que existen entre el litio y los metales alcalinos térreos están relacionados a la valencia y capacidad de reacción de los elementos.
Mientras que los metales del grupo 1 poseen un electrón en su capa más externa y tienen tendencia a perderlo en reacciones químicas, formando iones, aquellos del grupo 2 poseen dos electrones en esa misma capa. Al igual que los alcalinos, los térreos también tienden a perderlo y a formar iones de carga positiva +2.
Al entrar en contacto con el agua, los metales alcalinos reaccionan con efusión, salvo el litio que es más suave, pero los alcalinos térreos son notoriamente menos reactivos. Sobre su obtención, además, y tal como su nombre lo indica, los alcalinos térreos son más abundantes ya que suelen estar presentes en la corteza terrestre, mientras que el litio a menudo es más difícil de identificar y, posteriormente, de extraer.
