Empleo, infraestructura y emprendimientos: así las comunidades crecen con el litio

En aquellas geografías históricamente postergadas de Argentina, un cambio significativo está transformando el rostro de las comunidades que durante décadas enfrentaron la marginación y la pobreza. Este cambio está siendo impulsado por el desarrollo del litio, un recurso clave en la era moderna para un futuro más amigable con el medio ambiente.

Este resurgir económico que hoy viven en carne propia pequeños pueblos de la Puna argentina se extiende hacia una revitalización integral de estas comunidades, que abarca desde la infraestructura hasta la educación y el emprendimiento. Es así que las regiones del país que alguna vez parecieron atrapadas en un tiempo inmutable están experimentando una metamorfosis.

“Si estudiás la historia de las zonas mineras, son zonas históricamente relegadas: sin infraestructura, desconectadas de la urbe, la metrópolis o las ciudades. Parecen un mundo de piedra pulido por el agreste viento, mucho más atrasado en todo sentido; y eso impactó en la cultura de las comunidades que las habitan, que también es distinta y ahí yace su encanto”, dice Gonzalo Castañeda Nordmann, Director del Instituto de Derecho Minero del Colegio de Abogados de Salta y ex Director General de Minería de Salta (2019-2020).

Gracias al desarrollo del litio, hoy la juventud de estos pequeños pueblos tiene la oportunidad de conocer un mundo nuevo, con el desafío de insertarse formalmente en el mundo laboral sin abandonar sus raíces, aprender de inversiones y oportunidades de negocios; algo a lo que no estaban acostumbrados.

“Hasta hace poco, muchas personas de estas comunidades no sabían lo que era un CUIT o que determinado servicio se debía facturar”, indica el ex Director General de Minería de Salta. “Sabemos que la maquinaria de la inversión y el empleo ha cambiado la dinámica de las comunidades a lo largo del mundo. Y para bien. Porque las necesidades de ellas se hacían notar a gritos de escasez, de falta de educación adecuada, de insumos, de servicios, y un sinfín de necesidades básicas insatisfechas”, comenta Nordmann.

Las iniciativas de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) y desarrollo sostenible impulsadas por las mineras están tejiendo una nueva narrativa en estas zonas olvidadas de la Argentina. Empresas como Livent, EXAR y Allkem se destacan por su compromiso con la generación de empleo local, programas de relaciones comunitarias y el impulso de emprendimientos que van más allá de la extracción de litio. 

El desarrollo del litio en Argentina

Argentina alberga aproximadamente la séptima parte de los recursos mundiales de litio y contribuye con aproximadamente la sexta parte de la producción global. De esta manera, se consolida como el tercer productor más relevante a nivel internacional. La disposición de este recurso en Argentina se encuentra principalmente concentrada en tres provincias del país: Catamarca, Jujuy y Salta.

Según datos del Ministerio de Economía, actualmente hay tres proyectos de litio en funcionamiento en las provincias de Jujuy y Catamarca, mientras que otros seis se encuentran en proceso de construcción en las provincias de Salta y Catamarca. Además, el país cuenta con 20 proyectos en una etapa avanzada de exploración y 22 proyectos en diferentes etapas de desarrollo y exploración en las provincias mencionadas, San Juan y Río Negro.

Esto ha tenido un impacto significativo en la generación de empleo local y desempeñó un papel crucial en la integración social de las comunidades circundantes. Desde los puestos de trabajo directos en la exploración y extracción de litio, hasta las oportunidades laborales indirectas en la cadena de suministro y los servicios relacionados con la industria. Estas se han convertido en valiosas opciones para los residentes locales.

Un ejemplo concreto de esta dinámica es la empresa Sales de Jujuy, donde el 40% de sus empleados proviene de la propia localidad de Atacama, mientras que otro 35% son originarios de otras zonas de la provincia. Esto significa que un 75% de la fuerza laboral de la empresa proviene de la comunidad local.

Inclusión laboral

Los últimos datos oficiales del Sistema de Información Abierta a la Comunidad sobre la Actividad Minera en Argentina (SIACAM), muestran que el desarrollo del litio genera 2930 puestos directos, de un total de 39.000 mineros que hay en el país.

Sin embargo, Gonzalo Castañeda Nordmann, Director del Instituto de Derecho Minero del Colegio de Abogados de Salta y ex Director General de Minería de Salta (2019-2020), subraya que el impacto laboral que los proyectos de litio han tenido en las comunidades locales pueden medirse de muchas maneras. 

“En materia de empleo minero, hay que tener algo muy presente: las empresas -sobre todos las exploradoras y las que están en construcción-, tienen la mayoría de los servicios e insumos subcontratados”, introduce Nordmann.

Y ofrece el ejemplo de una minera que asesora. “Tiene 93 empleados en relación de dependencia, 52 trabajando en oficina y el resto en campo. De estos 93, el 35% es de comunidades de la zona. Pero vos vas al campamento y ves un centenar de personas, y te preguntás: ¿de dónde sale esta gente? Ya que no son de la empresa. Eso pasa porque son de los servicios que se subcontratan –catering, perforaciones, consultorías ambientales, entre otros-”, profundiza.

Por eso, enfatiza que el mundo de los contratistas es mucho más amplio. “De ahí que las provincias promuevan esta pata de la actividad, procurando que se contrate en anillos: primero en la comunidad, luego en la provincia, luego en el país, y  recién ahí en el exterior”, explica.

Dentro de la transformación de la comunidad

El caso de Antofagasta de la Sierra

Desde la empresa Livent, una de las principales compañías detrás del desarrollo del litio en la Argentina, enfatiza su compromiso con los principios de Responsabilidad Social Empresarial (RSE), “Nos aseguramos de supervisar nuestro impacto en las comunidades donde operamos”, precisan desde la compañía.

“Desde 2021, crearon más de 330 puestos de trabajo en Antofagasta de la Sierra, alineados con nuestra política que prioriza la generación de empleo local”, agregan respecto a la visión que tiene Livent.

Además, a través de su “Programa de Relaciones Comunitarias”, en el que invirtió más de USD 2,8 millones, han financiado distintas mejoras para la ciudad de Antofagasta de la Sierra: paneles solares, primer parque recreativo infantil, primera biblioteca pública, calefacción para la escuela primaria de Antofagasta y una nueva camioneta para el transporte de personas para la Municipalidad.

El foco también está puesto en los emprendedores, mediante el programa “Emprendedores de La Puna”. Livent brinda capacitación a los miembros de las comunidades locales para que puedan gestionar su propio negocio. En 2022, el programa estuvo centrado en los negocios dedicados al comercio, el turismo, la cultura y la minería. Durante el primer trimestre de 2023, pasaron por el programa vecinos que pertenecían a un total de 28 emprendimientos.

“Como parte de esta iniciativa, también llevamos a cabo una encuesta en la ciudad de Antofalla para identificar los temas de mayor interés para los cursos futuros, destacando el marketing y la atención al cliente. Además, continuamos ofreciendo clases a los participantes más antiguos para seguir fortaleciendo sus habilidades emprendedoras, adaptándonos a su nivel actual de conocimientos”, comparten en un informe elaborado por la empresa.

Paralelamente, de destaca el Programa de Desarrollo Sostenible Agroganadero coordinado por la Fundación EcoConciencia, una iniciativa que promueve el desarrollo sostenible de la Puna Catamarqueña mediante la capacitación y asistencia técnica a productores ganaderos y agropecuarios de las comunidades cercanas de Antofagasta de la Sierra y Ciénaga Redonda.

Livent ha contribuido con equipos, maquinaria y otros materiales para llevar a cabo diversos proyectos, como la capacitación para la captura y esquila de vicuñas, la mejora del bienestar animal y el apoyo al arte local. “Este último año, también apoyamos un proyecto local de elaboración de salchichas caseras, proporcionando todos los equipos necesarios para su realización. Además, hemos iniciado proyectos para llevar agua potable a las familias de zonas remotas”, comparten desde la minera.

Infraestructura y esparcimiento

En su reporte de sustentabilidad del 2022, la minera Allkem también dio a conocer los programas de compromiso con la comunidad desarrollados e implementados en cada sitio. Su responsabilidad comunitaria se describe en su Política de Desempeño Comunitario y Social, disponible públicamente.

Allkem ha contribuido en las obras de infraestructura de una escuela primaria y secundaria para la comunidad cercana al proyecto Sal de Vida, en Catamarca. También proporcionó sistemas de agua caliente solar a las viviendas de la zona e implementó el servicio de internet inalámbrico que beneficia a las 11 familias.

En Huancar, una comunidad de 430 personas en Jujuy, la compañía construyó un albergue turístico compuesto por dos cabañas de tamaño familiar. Este fue construido con materiales locales, utilizando métodos de construcción tradicionales. La inversión financiera en este proyecto en el año fiscal 2022 fue de USD 17.446, comparten desde Allkem.

También se construyó una cancha de fútbol de césped sintético en Catua, una comunidad de pueblos originarios de 450 habitantes. Se trata de la primera cancha de este tipo en la región de Susques, situada en el oeste de la provincia de Jujuy, donde la falta de estos establecimientos había impedido hasta ahora que las comunidades locales pudieran desarrollar actividades deportivas como el fútbol. Este proyecto se realizó en colaboración con la comunidad y otras empresas de la zona. La inversión en este proyecto en el año fiscal 22 fue de USD 22.030.

Producción local

En la zona andina de la región de la Puna, en el Noroeste de Argentina, las comunidades están muy aisladas geográficamente. Allí, los habitantes se dedican a la agricultura y la ganadería a pequeña escala, así como a la producción de artesanías y a actividades relacionadas con la producción minera.

Allkem trabajó en colaboración con estas comunidades para construir Unidades de Producción de Alimentos Familiares (UPAF). Durante el año, los participantes de este programa han recibido capacitación, materiales, semillas y apoyo técnico para construir las unidades, plantar, cultivar y cosechar los productos.

Por su parte, en abril de 2023, la minera EXAR llevó a cabo una capacitación técnica junto a productores ganaderos de distintas comunidades. Esta capacitación se enfocó en explorar diversas alternativas de producción agropecuaria que puedan ser implementadas en las condiciones ambientales de la Puna. Un total de 32 productores de las comunidades de Pastos Chicos, Juancar, Susques, Olaroz Chico y El Toro participaron en el evento.

Previamente, en 2022, la empresa había organizado la «Feria de Atacama» con el propósito de exhibir los logros del programa «Escuela Atacama», destacando todos los productos y servicios disponibles en las comunidades locales. En 2021, EXAR ya había invertido una suma de $1.275.137 en diversas iniciativas en beneficio de las comunidades originarias.

Educación

Allkem apostó también por la educación de las comunidades. En julio de 2021 firmó un convenio junto al Ministerio de Educación de la Provincia de Catamarca para desarrollar un programa de finalización de estudios secundarios para miembros de la comunidad local de Antofagasta de la Sierra.

El programa se desarrolló e implementó a lo largo del año y culminó exitosamente en junio de 2022, con dieciséis participantes que completaron sus estudios secundarios. Diez de estos participantes exitosos son miembros de la comunidad aborigen Kolla Atacameña de Antofalla.

Una iniciativa similar fue impulsada por Livent. “En el año 2022 otorgamos un total de 56 becas, de las cuales 27 estuvieron dirigidas a residentes de Antofagasta de la Sierra, fortaleciendo así nuestra meta de impulsar la educación en los jóvenes”, cuentan desde la organización.