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Argentina forma parte de unos de los países con mayores reservas de litio del mundo. Integra el denominado “Triángulo del litio”, una zona conformada junto a Chile y Bolivia que se caracteriza por su alta concentración de litio.
La producción del recurso en los últimos años aumentó considerablemente gracias a los proyectos en vigencia. El país inició el año con un total de 35.000 toneladas de carbonato de litio producidas y lo cierra con un número que lo duplica.
De acuerdo a estimaciones, el país finalizó 2023 con un total de entre 65.000 y 70.000 toneladas producidas, en parte gracias a una tercera operación de litio que se inició en el segundo trimestre. Se espera que la tendencia seguirá creciendo aún más con el desarrollo de más proyectos.
Es sabido que, cuando se habla de litio, se habla de desarrollo, medio ambiente y tecnologías. El recurso es una de las piezas centrales para la transición energética por su papel crucial en la fabricación de baterías para dispositivos electrónicos y vehículos eléctricos.
Argentina se ha convertido en uno de los principales productores a nivel mundial junto a Australia, China y Chile. En 2022, Australia llegó a producir un total de 324.000 toneladas de litio, seguido de Chile con 207.000 y China con 101.000. Argentina está en el cuarto lugar y, según la Subsecretaría de Desarrollo Minero de la Nación, ese año el número alcanzó más de 33.000 toneladas. En la región, junto al país vecino y Bolivia, conforma el denominado “triángulo del litio”, una de las principales zonas con alta presencia del mineral.
Según cifras de la Secretaría de Minería, el litio significó el 19% de las exportaciones mineras totales del mes de mayo de 2023 y, en los primeros cinco meses de ese año, tuvo un crecimiento del 84% interanual, acumulando USD 369 millones.
Debido a la alta cantidad de proyectos activos, y a aquellos que están en etapa de construcción y operarán desde 2024 y 2025, Argentina logró aumentar considerablemente las toneladas de litio producidas a lo largo del año.
En 2023 partió la primera fase de Cauchari-Olaroz, proyecto de Minera Exar en la provincia de Jujuy, que reportará 40.000 toneladas de carbonato de litio para baterías. En 2024 está contemplado el ingreso en producción de dos grandes proyectos: Sal de Oro, desarrollado por Posco Argentina, que aportará 25.000 toneladas de hidróxido y carbonato de litio y Mariana, perteneciente a Ganfeng Lithium y Litio Minera Argentina para contribuir con 20.000t/a de cloruro de litio.
El siguiente año, en 2025, Eramine Sudamérica operará en Centenario-Ratones en Salta y se estima que aportará casi 25.000 toneladas de carbonato de litio para baterías, seguida de la puesta en marcha de un proyecto similar en la región chilena de Atacama por parte de la Minera Salar Blanco.
En 2022, Argentina produjo un total de casi 35.000 toneladas de carbonato de litio. Un año después, para finales de 2023, el número ascendió a 65.000 y 70.000 toneladas. Se espera que la tendencia siga creciendo y, gracias al desarrollo de los proyectos mencionados y aquellos que están en exploración, en 2025 se estima que la cifra alcanzará las 229.000 toneladas.
La producción del recurso en los últimos años aumentó considerablemente gracias a los proyectos en vigencia. El país inició el año con un total de 35.000 toneladas de carbonato de litio producidas y lo cierra con un número que lo duplica.
De acuerdo a estimaciones, el país finalizó 2023 con un total de entre 65.000 y 70.000 toneladas producidas, en parte gracias a una tercera operación de litio que se inició en el segundo trimestre. Se espera que la tendencia seguirá creciendo aún más con el desarrollo de más proyectos.
Litio y empleo
En un artículo para el sitio Infobae, el periodista Sergio Serrichio especificó que en el rubro minero, en particular en lo que refiere al litio, se cumplieron 30 meses consecutivos de crecimiento a nivel económico y, por ende, social.
Debido a la alta demanda se generaron 742 nuevos puestos directos de trabajo para sumar un total de 2930, un aumento del 34% respecto a junio de 2022. Para el autor, habrá más crecimiento en los próximos años.
En cifras
La producción de litio en Argentina está en constante aumento gracias a la cantidad de puntos de extracción ubicados en su mayoría en las provincias del norte. Catamarca, Salta y Jujuy se han convertido en los últimos años en las provincias con mayor presencia del mineral gracias a la abundancia de salares y salinas.
Roberto Cacciola, el presidente de la Cámara Argentina de Empresas Mineras (CAEM), reveló en una entrevista televisiva que el sector litífero empezó el año con una capacidad de producción de 35.000 toneladas de carbonato de litio.
La producción del recurso en los últimos años aumentó considerablemente gracias a los proyectos en vigencia
Según informó el experto, el país terminará el año con un total de entre 65.000 y 70.000 toneladas producidas, en parte gracias a una tercera operación de litio que se inició en el segundo trimestre.
Cacciola se mostró optimista y destacó que, cuando los proyectos en construcción comiencen a producir, la capacidad llegará a 260.000 toneladas anuales, es decir, siete veces mayor si se lo compara con el inicio del 2023.
El referente de la CAEM remarcó además que las exportaciones de litio alcanzarán casi los USD 1000 millones, cuando en 2022 el monto cerró en USD 700 millones. De cara a lo que será el 2024, se espera un total entre USD 1350 y 1400 millones.
Demanda de litio en Argentina
El “Informe Litio” (2021) del Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación determinó que, tras la apertura de las industrias después de la pandemia en 2020, la demanda de litio aumentó considerablemente y se divide en dos categorías generales: usos tradicionales y baterías recargables ligadas esencialmente a vehículos eléctricos.
- Usos tradicionales: refiere a vidrios y cerámicas, donde el litio “otorga determinados beneficios como la adhesión y la dureza”. En esta categoría se encuentra a su vez la aplicación a grasas y lubricantes para lograr mayor manipulación de materiales en contextos térmicos adversos. Las industrias plásticas, la producción de medicamentos y las placas de blindaje están englobadas en este punto.
- Baterías recargables: tiene vinculación con los dispositivos electrónicos, como los smartphones, las consolas de juego y dispositivos médicos relacionados a la salud. El 95% del litio que se utiliza para baterías es reutilizable, lo que le brinda a la producción un carácter de sustentabilidad. El auge de la demanda de autos eléctricos como parte de la transición energética también es clave en esta categoría.
El informe del Gobierno estima que el mercado se divide en dos categorías: por un lado, los carbonatos de litio y, por el otro, los hidróxidos:
“Es así como la demanda de este mineral se divide, aproximadamente, en un 70% carbonatos, 25% hidróxidos y el restante 5%, otros tipos de litio. Cabe destacar que dentro de cada uno de estos dos productos existen subproductos debido al grado de pureza alcanzado. De esta manera se puede encontrar el grado técnico (pureza menor a 99,5%) o batería (pureza mayor igual a 99,5), por lo que puede decir que la demanda de carbonatos se compone de 23%-77% y los hidróxidos, 35%-65%, respectivamente”, informaron los expertos que realizaron el estudio.
A raíz de lo que son los proyectos activos en Argentina y los que se activarán el año que viene y en 2025, se estima que la producción de litio aumente hasta siete veces más debidos a la presencia del mineral y a la alta demanda que hay del mismo tanto en el país como a nivel global.
El camino del litio
Según la consultora internacional CRU, se estima que la producción del mineral crecerá un 50% anual, más del triple que la chilena. De acuerdo a un artículo de Infobae, para el año 2027 Argentina podría convertirse en el tercer o segundo productor mundial de litio, detrás de Australia y desplazando a China y Chile de la ecuación.
Con base en Chile, la consultora especializada en minería afirma que Argentina, gracias a sus operaciones activas y los mencionados proyectos en desarrollo, tiene un potencial de crecimiento de la producción del 50%.
Por su parte, en los próximos años se estima que el aumento en Chile será únicamente del 16%. Con una expansión menos precisa a la vez que inferior, China también presentaría menos crecimiento a comparación con Argentina.
